En primer lugar se debe colocar el robot en posición.
Luego se debe verter el agua, la levadura y el aceite, procediendo a programarlo a 37° de temperatura, con potencia calorífica 2 y velocidad 1, durante 1 minuto.
Seguidamente se debe agregar la harina de fuerza, la porción de sal y la harina de centeno. Se procede amasar a velocidad 2 durante 4 minutos. Es importante que la masa quede pegajosa para poder moldearla.
Luego, se unta un recipiente con aceite para introducir la masa, dejándola fermentar durante 1 hora.
Tomamos un poco de aceite y lo untamos en las manos y comenzamos hacer pliegues a la masa para reducir su contenido gaseoso. La dejamos reposar durante 1 hora.
En el paso siguiente, se comienza a darle forma al pan que se va a elaborar, dejando que duplique su volumen sobre la bandeja de horno que está revestida con papel vegetal. Se procede para ello a precalentar el horno a 200° de temperatura.
En este paso, se pulveriza el pan con agua y se reparte por encima una porción de chía conjuntamente con semillas de lino y avena.
Transcurrido el tiempo previsto se introduce el pan en el horno a 200° de temperatura durante aproximadamente 40 minutos.
Luego se deja enfriar sobre una rejilla fuera del horno, para que sea servido y consumido.